viernes, 28 de enero de 2011

Invisible

Vacaciones...qué hacer...qué leer... Me encuentro mirando la estantería. Muchos libros pendientes. Y de repente, encuentro Invisible. Auster para mi puede ser un acontecimiento, un estremecimiento o, una tremenda decepción. Es mi Sabina en escritor. Sé que, probablemente no escribirá nada que me guste tanto como lo que ya ha escrito. Pero tantos años de buenos momentos, tantos años de tocarme el corazón y de incitarme a imitar su forma de escribir, merecen el comprar su nuevo libro. Escuchar su nuevo disco. Así que tengo Invisible y tiempo. Una tetera, un buen sofá, la luz adecuada y las madrugadas. Y me encuentro otra vez con él. Desarrolla la historia en varios planos. La historia de un brillante estudiante de letras en Columbia. Este brillante estudiante cuanta la primera parte en primera persona, para luego, dejar paso a un narrador externo, un antiguo colega de universidad que, a través de la lectura de un manuscrito. pone voz a la historia de nuestro protagonista. Y te atrapa. La historia te atrapa. Necesitas saber más. Necesitas que el protagonista te cuente más cosas de su vida. Y en parte lo hace. Faltan fragmentos. Elementos que te permitan saber si ha disfrutado de una vida adulta plena, si realmente, ese brillante estudiante ha lamentado lo que hizo o lo que no hizo durante toda su vida. El final. Supongo que a cada uno le gustan los finales de forma diferente. A mí, me parece embarullado, en cierta parte innecesario y mal conectado con el hilo de la historia. Tal vez a ti te guste.